¿Que melodía estamos enviando al universo?

Existe un patron Universal, la existencia infinita, lo que Es, lo manifestado y no manifestado, algo que en forma humana no se conoce, algo que se va experimentando y solo se percibe de acuerdo a los niveles de consciencia que alcanzamos.

Solo podemos decir que existe Uno, DIOS, una inmensidad incalculable, que a la vez es diversidad y expansión, energías manifestadas de formas infinitas, que de acuerdo a su densidad son plasmadas en la forma que son percibidas por nuestros sentidos.

Cada individuo es un universo por conocer y explorar, aquellos universos  a la vez se entrelazan y se conectan.

La vida posee muchos matices, muchas realidades forjadas por nosotros, existen realidades que no hemos alcanzado a vislumbrar, es un descubrimiento constante, hay cosas maravillosas que permanecen ahi esperando que las descubramos, son tesoros ocultos que esperan ser encontrados por nosotros.

Toda forma física es creación divina, no existe nada que no provenga de aquella maravillosa esencia de Amor, por lo tanto sin entrar en descripciones, ni aplicar conceptos, TODO ES BELLO.

La vida en el plano material es algo que sucede en continuo movimiento con nuestra existencia o sin ella, lo que experimentamos en forma física es solo una pequeña parte, en nuestro interior no hay fin, somos eternas manifestaciones de la creación, a medida que somos conscientes de ello nos vamos dando cuenta que nada termina, sino que son ciclos que se cumplen en ese estado, pues somos solo personajes que cumplen un rol muy importante en este gran entramado que es como una danza del universo que fluye en un compaz de una gran sinfonía , donde cada uno es un sonido vibratorio o lo que sale de nosotros es recibido por el universo para su constante creación, su constante expansión.

¿Que melodía estamos enviando al universo?

¿Que sonido nos gustaría oír?

Lo que estamos viendo, toda esa realidad en el mundo, aquello que nos decepciona de otros seres, aquello que no nos gusta ver, la falsedad, las guerras, las diferencias, las divisiones, el materialismo, la ambición, las desesperanzas son nuestros propios "sonidos" de la orquesta, también aquello que nos emociona, que nos conmueve, que nos hace vibrar de alegría, el amor que sentimos, la nobleza de algunos seres, las personas amables y carismáticas, la luz que se desprende de nuestro interior en obras bellas hacia nuestros semejantes, aquellas hermosas y geniales creaciones tecnológicas, la sanación energética, las demostraciones de amor verdadero, también son sonidos nuestros, que nos despiertan a la conciencia que todo no es mas que nuestra libre elección de como estamos haciendo uso de aquella energía creadora ilimitada, que maravillosamente opera para nosotros.


Por Marisol Garrido